Frustración. Frustración es lo que una siente cuando se encuentra bien, con energía y ganas de hacer cosas y la obligan a estar en casa de baja un par de semanas.

Esta semana ha sido durilla. Quizá no tanto físicamente, pero sí psicológicamente. El martes tuvimos la eco 4D en la que pudimos ver la carita de nuestro peque… es una monada y hay fotos que yo, sinceramente, no puedo parar de mirar. Abro el álbum de flickr y lo miro. Abro el álbum de facebook y lo miro. Abro el blog del minibicho y lo miro. En fin, que lo miro a todas horas :)
Eco4D_carita-1
Aunque la ecografía no fue tan divertida como esperábamos. La ecógrafa nos asustó de lo lindo al decirnos que el peque realmente tenía muy poco líquido amniótico y que ése era un problema grave. Yo, sinceramente, me asusté mogollón y aunque luego la mujer se puso a revisar todos los órganos del peque y decir que todo estaba bien, el susto en el cuerpo, las dudas y la inseguridad no me lo quitaba nadie. Así que una hora después estábamos en la consulta de mi ginecólogo, el Dr. Vizcaíno, para mostrarle unos análisis (me dijo que todo bien, menos la glucosa que era dudosa – tenía que hacerme la prueba larga) y comentarle el tema del líquido amniótico. Él nos hizo otra ecografía, midió el líquido en cada cuadrante y nos tranquilizó mucho diciendo que era suficiente… que no era mogollón, pero que era suficiente. De todas maneras, él también me recomendó estar dos semanas de baja en casa, en «reposo domiciliario» como dicen los médicos, para evitarme el estrés del curro y el transporte público. Así que aquí me tenéis, en casa, descansando a ver si la cosa mejora. Es raro esto de estar de baja. Te sientes «prescindible» y piensas en que en el curro se van a dar cuenta de que no te necesitan y cuando vuelvas te van a despedir… no sé si es normal sentirse así, nunca había estado de baja antes, pero así es como me he sentido estos primeros días. Hoy, en cambio, ya estoy mejor y pienso que lo más importante es mi peque. El curro que tengo ahora me encanta, pero al final del día me sirve para pagar el alquiler, mis caprichos y las cositas del peque… si tengo que hacer otra cosa en un futuro, la haré, no sé si me entendéis. En fin, que me he comido mucho la olla estos días pero espero estar más animada de ahora en adelante.
Por lo demás, ayer miércoles estuve unas horillas en el centro de análisis Megalab, para hacerme la curva larga de la glucosa, un rollo, pero había que hacerlo. En vez de pincharme 4 veces, directamente me pusieron una vía, me tumbaron en una camilla dentro de un cubículo privado, me pusieron la tele y ahí estuve toda la mañana. Luisete me acompañó y fue guay saber que estaba allí; él iba y venía (estaba a ratos sentado en la sala de espera, fue a comprar unas cosillas, etc) y me hacía compañía en muchas ocasiones, así que al final salimos (a la hora de comer) y aunque había sido un coñazo, se pasó más rápido de lo esperado :) Eso sí, físicamente estaba molida: tantas horas allí tumbada sin poder hacer nada, en la misma posición y viendo a Ana Rosa Quintana… ¡cansan a cualquiera! :)))) En una semana tendremos los resultados y sabremos si hay diabetes gestacional o no; cruzad los dedos.
Así que voy a dedicar estos días a hacerle muchos mimos al minibicho, a descansar, a escribir y a relajarme, a ver si el tema del líquido amniótico mejora. Estoy trabajando un poco desde casa, pero sólo las cosas importantes (hoy he tenido una call, por ejemplo), pero con calma, que no quiero que el bicho se me estrese y se quede sin líquido :)
Os iré contando. Gracias a todos los que me habéis escrito emails y DMs para animarme. Lo cierto es que el martes estaba muy asustada y siempre va bien que la gente te apoye y te mande besos, aunque sean virtuales.
Besotes,
Lau