Pues como estamos con el subidón gastronómico, hoy he decidido hacer otro plato rico de la gastronomía sueca: la tentación de Jansson (en el título del post está el nombre en sueco). Dicen las historias que el tal Jansson era un religioso sueco de los que fueron a América, pero era muy severo con todo, pero encontró este plato, y no pudo evitar sentirse tentado y comérselo (a escondidas, claro).

La verdad es que el plato es muy sencillo, pero muy sabroso. Lleva varias capas de patata, cebolla y anchoas, todo ello remojado con nata y leche, y luego al horno. No veáis cómo nos hemos puesto… Estaba para chuparse los dedos, y lo bueno es que siempre queda para repetir al menos una segunda vez!

A ver qué es lo próximo que hago, pero conociéndome, o es una tarta o es algo que se salga de lo normal :P

Saludillos
Luis