¡Comenzamos nuestro sexto día en Japón! Y se levanta claaaaaaro claaaaaaro… tanto que así vemos el Fuji-san desde la habitación, ¡increíble! Con lo que nos costó verlo hace 4 años, y lo bien que se ve ahora (se nota que es invierno).

El monte Fuji nos da los buenos diás

Desayunamos algo y cogemos la Yamanote hasta la estación de Tokio, donde cogemos un shinkansen hasta Takasaki. Al llegar a la estación, tenemos que esperar media hora hasta que viene un bus especial que se pone hasta arriba de gente y que nos lleva a todos hasta el templo dedicado al daruma. Y es que hoy se celebra el Daruma Ichi, el festival del templo Shorinzan, con lo que todo Takasaki va ahí a depositar sus darumas y amuletos antiguos y a comprar darumas y amuletos nuevos. Y nosotros también, of course!

En el shinkansen

Cuando llegamos, nos bajamos como todo el mundo y recorremos el camino hasta el templo, que está repleto de puestecitos de comida típicos de este tipo de celebraciones (yakisoba, okonomiyaki, taiyaki, patatas, salchichas, etc)

Puestos de comida

Y ya por fin llegamos a la entrada del Shorinzan, el templo de los darumas:

Entrada al santuario

¡Y a hacer ejercicio! Teliiiiiiita la de escaleras que tiene, eso es una peregrinación en toda regla, jajajajaa.

Subiendo al santuario

Santuario del daruma

Al llegar a medio camino, vemos el mercado de darumas y amuletos. Hay multitud de puestos de darumas de todos los tamaños y de muchos otros tipos de amuletos para la abundancia en los negocios y la riqueza, sobre todo.

Festival del daruma

Daruma

Daruma

Amuletos

Amuletos

Y ya nos acercamos al templo…

Santuario del daruma

… donde hay un daruma enoooorme en el que nos hacemos una foto de familia:

Daruma

Y ahí mismo, en uno de los puestos de comida, nos compramos un okonomiyaki y comemos todos algo (aunque Eric no está muy por la labor, será porque en la estación se había comido un onigiri…)

Eric tiene hambre

Y con las fuerzas recuperadas después de comer algo y de haber comprado algunos darumas, iniciamos el camino de descenso:

Descenso

Descenso

Y volvemos en bus hasta la estación de Takasaki y allí cogemos un shinkansen (que va pesadísimo, ya que no llevamos asiento reservado y los vagones sin reserva van a tope, hasta el punto de que Luis se tiene que quedar de pie hasta Omiya) hasta Tokio. Ya que el shinkansen para en Ueno, decidimos bajarnos también en Ueno y dar una vuelta por el parque de Ueno.

Comenzamos viendo el templo Benten-do, que está anocheciendo y no nos quedan muchas horas de luz.

Templo Benten-do

De hecho, vemos cómo anochece desde uno de los estanques del parque, el Suijudobutsu-ike.

Suijudobutsu-ike

Paseamos por la zona hasta llegar al templo Toshogu, donde ya es casi de noche cuando llegamos, está poco iluminado y ya está cerrado (en las fotos se ve más claro de lo que en realidad estaba, creedme):

Templo Toshogu

En la zona central del Parque de Ueno había una iluminación especial con lámparas de dibujos de la historia japonesa, muy chulo:

Festival de las lámparas

Al salir del parque de Ueno, cogimos la calle Ameyoko, muy conocida por ser una callejuela comercial, un mercadillo paralelo a las vías de la JR:

Mercadillo de Ameyoko

Mercadillo de Ameyoko

El mercadillo de Ameyoko es muy variado y tiene desde puestos de ropa y complementos (algo cutres, todo hay que decirlo) hasta puestos de pescado fresco y marisco, fruta, encurtidos o legumbres.

Mercadillo de Ameyoko

Cuando se acabó la calle comercial, Eric estaba frito en su cochecito y no queríamos despertarle, así que decidimos seguir andando, paralelos a las vías del tren, hasta llegar a Akihabara (era un paseíllo, pero no estaba tan lejos) y la verdad es que llegamos en un pis-pas. Nada más llegar vimos un Mos Burger y como Luis no había probado nunca las hamburguesas de esta cadena japonesa, decidimos entrar y comer una hamburguesa los tres. A Eric le pedimos una hamburguesa teriyaki que le gustó bastante, aunque el pobre estaba medio frito, todavía…

Mos Burger

Y ya después de cenar, dimos una vuelta por las calles principales de Akihabara viendo la multitud de locales frikis que hay en la zona, ^_^

Akihabara

Akihabara

Akihabara

También vimos el AKB48 cafe & restaurant, de nuestras conocidas AKB48 (¡había una cola enooooorme para entrar! ¿Pero qué les pasa en este país con las AKB?!)

AKB48 caffee & shop en Akihabara

Y el Gundam Cafe:

Gundam Cafe en Akihabara

Y después de dar una vueltecita más por Akiba, cogimos la JR hasta Shinjuku y de vuelta al hotel a descansar y a dormir :)

Tenéis más fotos del día seis, aquí ;)

Besos,
Lau y Luis y Eric