Bajo un nombre tan rimbombante se esconde el curso en el que he estado los dos últimos días, un curso de formación corporativa de mi empresa…

La verdad es que la primera impresión no era muy positiva, al ver el tema del curso y los puntos que íbamos a tratar, pero bueno, no siempre hay que quedarse con la primera impresión, porque en este caso, el curso resultó ser muy interesante tanto por los contenidos como por el propio formador, que era estupendo…

Además, había muchas actividades en grupos, lo que fomentaba el que nos fuéramos conociendo todos (todos éramos de la misma empresa, pero de muy diversas procedencias dentro de España…). Yo, y no sé por qué, acabé haciendo muy buenas migas con un par de chicas de Barcelona, encima catalanoparlantes ellas… ¿Qué tendrá Cataluña? :DDDDDDD Os dejo una fotito de un momento por la tarde ayer, mientras preparábamos
una de las actividades (nosotros ya habíamos terminado de prepararla, por eso estaba un poco ocioso jejejeje)

Al final, la conclusión es que hay que ir al trabajo con mentalidad positiva, que siempre se contagia. Y es que es cierto, nosotros somos capaces de escoger nuestra forma de ser ante la gente, y podemos ser agradables y tomarnos las cosas en positivo (a pesar de los líos o problemas que pueda haber en nuestra vida privada).

Y recordad, los problemas entre compañeros siempre surgen de nimiedades, así que no dejéis que se hagan más grandes y resolvedlos en el mismo instante en el que surgen!

Bueno, ya me callo, que basta ya de dar consejitos jejeje…

Saludillos,
Luis