Como sabéis, hace cinco días que volvimos de Canadá… y hace cinco días que estamos sin maleta. Sí, una vez más (y ya van tres) una de nuestas maletas se ha perdido en un viaje de conexión, es increíble. Y el problema es que hablas con gente y todo el mundo te comenta experiencias similares, o sea que el número de maletas que se pierden por vuelo parece ser exajeradamente alto… lo dicho, increíble.
Pues bien, cuando llegamos a Madrid, con una de nuestras maletas, nos dijeron que la otra se había quedado en Londres (Heathrow era un auténtico caos, el día anterior se habían cancelado 150 vuelos, así que casi lo «entendimos» e intentamos ser «comprensivos») y como el día siguiente era Navidad no la tendríamos hasta el 26 de diciembre por la tarde. Nos cabreamos, claro, pero ya nos estamos haciendo expertos en la materia y, al final, qué le vas a hacer.
Total, que el 26 llamamos a British Airways para confirmar y allí empezó el calvario. Asalto 1: el día 26 nos dicen que han llegado muchas maletas de Londres y que no podrán ‘clasificarlas’ hasta por la noche, así que hasta el 27 no tendremos la maleta; Asalto 2: el día 27 nos dicen que la maleta salió el día 26 a las 12h de Londres pero que no saben nada más, que hay que esperar a que el servicio de handling del aeropuerto de Madrid actualice los datos, ah, pues muy bien, sí señor, a esperar, total…; Asalto 3: Ahora nos dicen que no saben si la maleta salió, si en efecto llegó a Madrid… que no saben nada, vaya, ¡pues mira qué bien! Y cuando les preguntamos qué más podemos hacer, tampoco saben decirnos nada… la monda.
Hartos hartísimos y con la experiencia de la perdida de nuestra maleta en San Francisco (fue exactamente igual de caótica la información y al final la maleta estaba ahí, abandonada, en el aeropuerto, donde fuimos a buscarla nosotros), hemos decidido dar el último asalto, el definitivo, así que nos hemos ido al aeropuerto a buscar nuestra maleta, pues estábamos seguros de que estaba allí.
Llegamos al aeropuerto, vamos a la oficina de equipajes extraviados de la terminal de llegadas y les mentimos un poquito, ^_^, diciéndoles que nos han recomendado ir al aeropuerto a ver si nuestra maleta está ahí. El chico lo flipa (y yo riéndome por dentro, jejejejeje) y nos pregunta quién nos ha recomendado eso, así que bordería al canto: «hemos llamado tantas veces pidiendo información, que por cierto no nos han dado, y hemos hablado con tanta gente que yo qué sé quién nos lo ha dicho». Hoooooooombre, es que cansaditos estamos ya. Total, el chico nos ve tan dispuestos a pasar y encontrar nuestra maleta que nos permite entrar a la zona de recogida de equipajes… Cruzamos la puerta, le enseñamos el ‘permiso’ a uno de los guardias y nos vamos a las oficinas internas de la zona de recogida de equipajes. Allí, nos acompañan a una sala donde tienen las maletas extraviadas… ¡y allí no está! Bajón total, pero todavía hay esperanza. Parece ser que hay otra sala, pero según una de las chicas, allí no debería estar porque todas las maletas de Biritsh Airways están en esa sala donde nos encontramos. Vale, vale, lo que quieras, pero yo me voy a la otra sala a ver si está ahí y… ¡sí estaba! Si es que…
Lo más fuerte es que la maleta había perdido el tag en algún momento desde Londres hasta Madrid, es decir, llegó sin tag, con lo cual podemos entender que hubiera algún problema. Lo que no logramos entender es que hubieran abierto el identificador, COPIADO los datos (nombres, dirección y teléfono) al ordenador e imprimido los mismos, colgando una copia en la maleta… ¡y nadie nos llamó! Es vergonzoso. Parece ser que cuando llegan sin tag, esperan cinco días (no sé muy bien a qué, ¿a qué explote la maleta y desaparezca?) y ya luego ven qué pueden hacer con ella… Yo es que no lo entiendo, si haces el esfuerzo de copiar los datos del identificador personal de maletas a tu ordenador, ¿no podrías hacer el esfuerzo de llamar y avisar al dueño? No, parece ser que eso es demasiado trabajo.
En fin, es triste que estas cosas sólo parecen solucionarse de manera «proactiva»: eres TÚ quien tiene que decir ‘a tomar por saco con tanto teléfono y tanta desinformación, me voy al aeropuerto a buscar mi maleta’ o ‘si hay 20 salas, quiero verlas todas, me da igual si en ésa no debería estar’… es vergonzoso.
Pero bueno, hay que ser positivos… el «ice wine» que traíamos en la maleta ya se está enfriando en la nevera… ¡me voy a tomar un chupitín después de cenar! Jejejejejee…
Besines,
Lau
por fin!
nos alegramos mogollón
y que poca vergüenza e interés tienen por dios!
:D
besos!
Pues si que tuvisteis tela con la maleta, pero bueno, por fin la tenéis en casa a salvo y a punto para perderse otra vez.
Si que debe de ser común lo de los extravíos, porque mi jefa en su ultimo viaje a Alemania al final se acabo comprando ropa, y es que le llego la maleta al poder el último día antes de venirse , que por cierto a la vuelta otra vez missing la maletita.
Con Heathrow siempre existen problemas. A mi una vez me perdieron una caja que contenía cerca de 12.000 euros en equipamiento electrónico a la vuelta de un viaje de empresa.
Menos mal que la caja estaba super-identificada con los logotipos de mi empresa, tarjetas de visita, etc… y también que era para la vuelta, porque si me la llegan a perder a la ida…
Ah, y eso que no era un vuelo de conexión ni nada, que era un vuelo directo LHR->BCN
Por cierto, felices fiestas.
Bueno, olvidé decirlo… recuperé la caja a los dos dias. ^^U
Como os entiendo! Este verano volé a Calgary, via LHR desde BCN, y mi maleta tampoco llegó a Calgary.
Después de llamar cada día a Air Canada (donde no tenían ni idea de donde estaba la maleta, por supuesto) me la entregaron en Vancouver después de 8 DÍAS!
Llegó a Vancouver con un montón de tags, de los vuelos en los que la habían intentado meter y en los que la habíam metido… Y sabéis donde estuvo la maleta? 7 días en el aeropuerto de BCN, no llegó ni a subir en nuestro avión. En fin, patético.
La parte positiva es que me tuve que comprar ropa nueva para 8 días :-) y que entre Amex y Air Canada nos han reembolsado todos los gastos.