Seguro que os preguntáis por qué hemos estado tan calladitos este fin de semana, ¿verdad? Pues la respuesta es bien sencilla: hemos estado en Igualada, ya que la futura novia necesitaba empezar a hablar con su madre sobre el vestido de novia, ya que será su madre quien se lo haga.

El viernes por la tarde cogimos un AVE hasta Lleida, donde los padres de Laura nos vinieron a buscar en coche y no llevaron a Igualada. Después de cenar, Luis se quedó roque en el sofá y finalmente se fue a la cama, momento que las dos mujeres aprovecharon con más intensidad para hablar de su tema: el vestido. La cosa fue muy bien y nada más y nada menos que a la 1 de la madrugada, después de ver catálogos de Pronovias, Rosa Clará y demás, ambas sabían exactamente de qué diseño estaban hablando. ¡Ya teníamos diseño!

El sábado comimos tranquilamente en casa y después de comer nos fuimos todos a Barcelona. Al principio del Passeig de Gràcia, Laura y su madre entraron en una tienda de tejidos muy conocida (Gratacós) y Luis y su suegro se fueron de paseo por el centro, ^_^, a pasar el rato, vaya. En la tienda de tejidos, encontraron una ropa de novia muy modera y vistosa, perfecta para el tipo de traje que ambas mujeres tenían en mente, pero por si acaso, los de la tienda les guardaron la ropa y ambas se fueron hasta la sección de tejidos del Corte Inglés de Plaça Catalunya y después hasta una tienda de tejidos en Plaça Uiversitat. Sin embargo, cuantas más ropas veían más claro tenían que la ropa que habían visto en Gratacós era la buena, así que volvieron a subir todo el Passeig de Gràcia y acabaron comprando la ropa y el forro para elvestido. ¡Misión cumplida!

Finalmente nos encontramos todos, nos tomamos unas cervecitas y a casita a cenar, ver una película (Million dollar Baby, ¡brutal, genial!) y a dormir, todo muy relajadito.

A la mañana siguiente, nos fuimos todos junto con el hermano de Laura y su novia Neus a celebrar el cumpleaños de la madre de Laura, que había sido el día anterior. Buena comilona, buen vino y buena compañía para cerrar un fin de semana espléndido. A continuación, de vuelta a Lleida, esta vez cogimos una Altaria, y hacia Madrid, donde llegamos casi 3 horas después.

Besitos
Lau y Luis