Vaya título, ¿no? Se parece al de una película romántica de Clint Eastwood, jajajajaja, pero nada más lejos de la realidad. Os cuento. Hasta hace unas semanas no sabía qué era esto de los puentes sumergibles (aunque mejor debería decir "puentes que se hunden" o "puentes que se sumergen" ^^), ni sabía dónde estaba el río Shimanto. Literalmente, no tenía ni ...sigue leyendo»