Pues sí, como dice el dicho… ¡año nuevo, vida nueva!

Sí, en menos de un mes estaremos viviendo en una nueva casa (¡yeeeeeey!), pero ha habido otro cambio radical… y es que como regalo de Reyes (sí, autoregalo, qué pasa, ^_^) decidí… ¡dejar el trabajo! (¡un ‘yeeeeeeeey’ todavía más grande, jejejeje!).

Y es que este nuevo trabajo ha sido una auténtica decepción. Intenté ser positiva al principio, pero a las pocas semanas me dí cuenta de que aquello no era lo que yo había esperado… ¡ni de coña! Seguí intentando ser optimista y positiva, aunque Luis sabe lo mal que lo pasé (tuvo que aguantar mi estrés y mi mal rollo, el pobre, viniéndome a buscar al curro para animarme casi todos los días) y sinceramente, la cosa iba de mal en peor y no había posibilidad de mejora. El trabajo era rutinario y mecánico (un robot lo haría mejor, porque no había que pensar nada), pero eso al fin y al cabo se puede aguantar (al final trabajamos para pagar el alquiler…). El problema de este trabajo no sólo era ése, sino que era extremadamente estresante: no daba abasto y no podía darlo (dos manos y un ordenador a tres por hora, no había más). Los clientes son todos exigentes, naturalmente, y cuando tienes que procesarlo todo en un ordenador que va a tres por hora y se te va acumulando todo, pues sinceramente, no se puede. Y los que me conocéis sabéis que me implico mucho, que quiero que las cosas salgan bien, y claro, los nervios me han comido estos meses. Total, que además de estar increíblemente aburrida en el curro estaba increíblemente estresada. Es dificil de explicar y quizá no lo entendáis, pero la sensación de agobio y ansiedad había llegado a un extremo difícil de controlar (no poder dormir por las noches, muchos nervios al ir a currar, etc.).

Así que al final he decidio darme un buen regalo de Reyes y después de tres meses de ‘sufrimiento’, dejarlo definitivamente, mi cuerpo y mi mente lo necesitaban y me lo agradecerán. Y ahora… ¡a buscar curro! He tenido un par de entrevistas y una de ellas me pareció bastante interesante, así que a ver si hay suerte y encuentro algo rápido… ¡y que no me produzca una úlcera de estómago en el futuro! :D

Ya os iré contando. Muchas gracias a todos los que me habéis dado ánimos estos días… ahora ya vuelvo a estar tranquila y a sonreír… ¡ya tocaba!

Un beso,
Lau
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You may remember a few months ago I told you I was offered a position as Project Manager in a translation agency. Well, after three months of real hell, I’ve given myself a Xmas prezzie and quit the job! It was definitely too stressing, made me suffer too much and at the end of the day, I realised there’s really no point. So I’m a happy bunny now! Job-hunting, but definitely happier!

Love,
Lau